domingo, 23 de agosto de 2015

SANTA ROSA DE LIMA

SANTA ROSA DE LIMA

El día en que su madre le reprendió por atender en la casa a pobres y enfermos, santa Rosa de Lima le contestó: "Cuando servimos a los pobres y a los enfermos, servimos a Jesús. No debemos cansarnos de ayudar a nuestro prójimo, porque en ellos servimos a Jesús".

Recuerda la cristiandad las ilustres virtudes de pureza, piedad, amor a Dios y al prójimo, y la hermosura y la gracia de una mujer peruana que floreció en Lima, en la místicay fervorosa edad del Virreynato, en el apacible siglo XVI: Isabel Flores de Oliva, conocida en todo el mundo con el simbólico y encantador nombre de Rosa; apelativo apropiadísimo por la hermosura de su alma y de toda ella y por el fragante perfume embriagador de sus virtudes.

El demonio la molestaba con violentas tentaciones. El único consejo que supieron darle aquellos a quienes consultó fue que comiese y durmiese más. Más tarde, una comisión de sacerdotes y médicos examinó a la santa y dictaminó que sus experiencias eran realmente sobrenaturales.

Rosa pasó los tres últimos años de su vida en la casa de Don Gonzalo de Massa, un empleado del gobierno, cuya esposa le tenía particular cariño. Durante la penosa y larga enfermedad que precedió a su muerte, la oración de la joven era: "Señor, auméntame los sufrimientos, pero auméntame en la misma medida tu amor".


 Después de leer el texto. Redacta los fragmentos subrayados usando el parafraseo ( en la parte del comentario)

SANTA ROSA DE LIMA, MUJER VIRTUOSA

Todos conocemos los valores  espirituales que enseñó Jesús a través del Evangelio,  los manifestó a lo largo de toda su vida, valores que hoy podrían servirnos como ejemplo de una vida pura, que estaba fundamentada en la verdad, pues Santa Rosa de Lima es el reflejo de ellos; su santidad era producto de haber cultivado los valores espirituales, que nuestro Creador puso en su  corazón.
Santa Rosa de Lima vivió intensamente  el  valor universal de  la “verdad”, fuente de todos los valores, por eso es que en su vida se cumplió la promesa que nos había dejado Jesús, cuando dijo: El que cree en mí, de su interior correrá ríos de agua viva.  De ella fluían como ríos el Espíritu Santo de Dios, que resplandecía  su rostro y se manifestaba en su vida.
Por ello fue símbolo de los Valores de la verdad, la justicia, la pureza, la unidad, la paz, la armonía, la vida. Valores que hoy cada familia deben  difundirlos a nuestra adolescencia y juventud, por esta  razón   San Juan Bosco decía: Si comenzamos a ser bondadosos en la juventud, lo seremos para el resto de la vida.  Los Santos, como Santa Rosa,  han cultivado este valor y han comenzado a servir a Dios desde la más tierna edad.
La vida de Santa Rosa de Lima estaba fundamentada en la verdad, de tal manera que todos los valores Espirituales fluían de su corazón, haciendo justicia a los más pobres, teniendo misericordia de los enfermos, amando al mundo sin diferencia alguna y entregando su alma a Jesús, “su esposo”. Así mostraba que ella propició la unidad y la paz que debe existir en el mundo, y la libertad del desposeído y oprimido por el más fuerte.
Es importante aclarar que Santa Rosa de Lima no fue religiosa, ella santificó al mundo en el seno de su familia, fue laica (tercera orden dominica) comprometida del Señor, y desde esta condición realizó el proyecto jamás visto en la historia de la humanidad, que es el camino al cielo, hacia el trono de Jesús.